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Cristina Miranda, enamorada de la moda, no encontraba la ropa perfecta para sus hijos y se dio cuenta de que, tal como ella, había muchas otras mamás que buscaban un estilo en particular, pero que no conseguían encontrar aquello que imaginaban. El sueño dio lugar al emprendimiento, y así nace Petit Amour.

En una zona noble de la ciudad, Petit Amour se convirtió en un lugar de referencia y rápidamente surgió la necesidad de crecer, y de ofrecer un servicio orientado completamente al vestuario que marca etapas y tradiciones antiguas: bautismos, comuniones, labores relacionadas con la fe, y otros eventos especiales.

En el edificio donde antes se ubicaba el Bazar Cruz, encontramos ahora una tienda que, así como su predecesora, pasó a formar parte de la vida de los bracarenses. Petit Amour presenta piezas de ceremonia de calidad superior, adecuadas a todos los presupuestos, y siempre con la premisa de que cada niño es único y especial.

La compra de un vestido en Petit Amour no es sólo una compra. Es una experiencia, tanto para las mamás, abuelas y madrinas, como para las niñas que terminan por sentirse como auténticas princesitas durante la búsqueda de su vestido ideal para la Primera Comunión o para el importante papel de portadora de alianzas. ¡El pequeño escenario que hay les encanta!

El estilo clásico y requintado, la atención al detalle, la conjugación de los colores, y claro, la comodidad de sus ropas (porque los más pequeños pueden vestir elegantes sin sentirse incómodos) son las claves del éxito de Petit Amour, y tanto la amabilidad de sus empleados como la decoración de la tienda están en perfecta harmonía con esos valores.

Sugerencia Cool: En Petit Amour no sólo encontrarás vestuario para ocasiones especiales, también podrás ver complementos. Desde velas y conchas de bautismo hasta cajitas de recuerdo y zapatos, todo lo que necesitas está en Petit Amour.